Hoy ha vuelto a cantar el aguacero,
en la voz de los infantes bajo el sereno.
Hoy ha vuelto a tronar la centella,
despierta más temprano el día.
Hoy mi puerta cruje de alegría
la penumbra del rancho es bella.
Hoy las velas se encienden solas,
y mi juventud sonriente me visita.
Hoy ha vuelto la carcajada de mis tardes,
en la voz de los infantes bajo el sereno.
Hoy ha vuelto a tronar la centella,
despierta más temprano el día.
Hoy mi puerta cruje de alegría
la penumbra del rancho es bella.
Hoy las velas se encienden solas,
y mi juventud sonriente me visita.
Hoy ha vuelto la carcajada de mis tardes,
el desvelo de mis noches,
el vapor del café en mis albas.
Hoy… ha vuelto
el vapor del café en mis albas.
Hoy… ha vuelto
hermoso..
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