martes, 29 de octubre de 2013

LO QUE SOBRA Y LO QUE FALTA

Esta mañana volví a besar tu aliento,
enredado en mi almohada maltrecha,
en el olor que dejaste extraviado,
en una esquina de mi desvelo.
Volví a ver tu montaña,
calentándose, paulatinamente
al ritmo de mi sol paseante.
Volví a ver tu vaso olvidado,
sobre la misma alfombra,
en la escena paralizada,
de nuestra última sonrisa.

Volví a extrañarte 
como el lactante al pezón materno 
y a media mañana, 
cuando la luz ya me hería los ojos, 
una epifanía, 
¡A esta cama le sobra un metro, 
y a esta vida le faltas tú! 

jueves, 24 de octubre de 2013

TRASNOCHO

Me duelen las piernas del alma
de tanto correr hacia ti.
Tengo sed de un lago de tus lágrimas,
tengo hambre de un puñado de tus risas,
tengo la calma del minuto antes del bombardeo,
¿dónde estás?
Reflejo en mis pupilas agotadas,
llovizna madrugadora,
de tanto esperarte solo me quedan dos falanges,
dejavú que me atormenta,
recuerdo de cincel en mármol,
de cuero repujado en mis neuronas,
ectoplasma,
fantasma matutino,
voy a desarmar otra vez el reloj,
para apurar las seis de la mañana.

miércoles, 16 de octubre de 2013

JESHUA



Mi cabello recio,
mi terquedad,
mi inicio, sustento de mis amores,
mis ojos profundos,
mi pensador.
Vas creciendo muchacho
poco a poco vas dejando de ser mío
cada vez eres más tuyo,
de tus sueños
de tus pensares
de tus edades y amores,
de tu soledad,
de tu vida.
Te veo y no me veo a mí,
¡Hice un buen trabajo!
Te amo.

KALEN



Si supieras la ternura
que engendras en mi pecho,
cuando tus manos acarician mis brazos,
cuando me sonríes al llegar la tarde,
cuando me pides que bese tus heridas,
cuando besas las mías.
El presente más hermoso eres tú,
llegaste
tan de madrugada,
tan de mañanita,
tan de improviso,
para hacerme entender que contigo renacía,
para transfundir una marejada de miel a mis venas. 
No me has dicho una palabra
y ya estoy en tus manos para siempre.
¡Hijo mío!

martes, 15 de octubre de 2013

CANCIÓN IMPERFECTA PARA ALÍ


Panita:
Por allí me dijeron que no estás.
Una lengua bífida menciona
que una botella fue tu última compañera
y una cuneta tu última cama.

Proclaman por allí tu despedida.

¡Insensatos!
Ignoran que tu voz es viento
es argumento
es idea
que es humana pangea
que es  guitarra ardiendo
es el pueblo entendiendo
que hay que aligerar la carga
que aunque la brega es larga
hay que abrir la brecha
hacer historia
que nuestra memoria
jamás debe apagarse
que debe alimentarse
con rebelde alegría
que el rezo es insuficiente
para alcanzar la paz
y que solo en la otredad
se humaniza la humanidad.



Algún día llevaré un clavel
pero no para recordar un muerto
quiero cantar contento
celebrando tu paso
pisando tu  huella
calentando mi alma
con la candela de tu canto
afinado el fusil con tu palabra
cargando de tu tinta mi pluma
para seguir la lucha
para ver las gaviotas otra vez
y espantar a los perros
para gritarte con los pulmones llenos
de la brisa de tu infancia:
 

¡Camarada!

lunes, 14 de octubre de 2013

BONDAD INSTITUCIONAL (ODA AL BURÓCRATA)


No eres como yo,
porque lo digo yo,
porque lo dicen las estadísticas,
porque salí del barrio,
porque nunca estuve allí.

Te estimo…
te respeto
pero no podría comer contigo,
sentarme contigo.
Firmaré las órdenes para tu pago,
pero no te curare las heridas,
no voy a escuchar tus historias de licor barato.

Yo te asistiría en un día de emergencias,
te completaría la planilla,
te daría tres monedas,
pero…
¿darte un beso?
¿tomar tu mano?
¿arroparte con mis brazos?
eso debo pensarlo.

Te defenderé siempre desde mi poltrona,
desde mis 21 grados
desde mis 19 pulgadas
aunque me de miedo mirarme en tus pupilas,
aunque me aterre escuchar tu voz.

No me negarás que soy bueno.

CANCIÓN PARA UNA DESPEDIDA

Tomaré,
pasos y noches para el camino,
un par de dados para el destino,
yo tomaré.

Tomaré,
mi bolso lleno de ilusiones,
mis diez poemas y seis canciones
y me iré.

Si una vez,
soñamos vernos arrugados,
la verdad terca nos ha alcanzado
y nos despertó.

Somos dos,
que decidieron encontrarse
y por la trocha acompañarse,
pero terminó.

Tomaré,
aquella foto si me dejas,
el alba espera,
sin moraleja,
no llores más.

¿Para qué?
si ya juramos olvidarnos,
si es que queremos encontrarnos,
en la soledad.

Ya mi voz,
es un absurdo en tu cabeza,
es una oda a la pobreza,
ya se secó.

Sale el sol,
y ya nada hay que decirnos,
sabes que es mito lo de morirnos
por amor.

DECLARACIÓN

De espaldas a la calle,
me lees el diario de tus días
y yo solo deseo,
ser al menos,
la nota marginal de un capítulo futuro.

De espaldas a la calle,
en una mesa con mil historias,
habitada por el fantasma humeante
de las tazas matutinas,
de espectros de botellas huérfanas
al filo del alba,
de sombras de copas rotas
como los corazones que las quebraron,
allí, en medio de una multitud sórdida,
mis dedos se quieren escapar de mis manos,
para escalar poro a poro tu brazo,
para alcanzar las sinuosidades
de la tinta que hizo patria en  tu espalda.

Abonar tus raíces,
oler tu primavera morena,
es el desespero de mis insomnios.

Arráncame las lágrimas sin miedo,
yo aprendí,
ya no sangro,
ya no temo a los finales,
para que algo termine
debe comenzar primero,
comienza...

Te espero en la misma mesa,
dibujando tu boca
como Cortazar,
a espaldas de la calle.

lunes, 7 de octubre de 2013

BIENVENIDA

Hoy ha vuelto a cantar el aguacero,
en la voz de los infantes bajo el sereno.
Hoy ha vuelto a tronar la centella,
despierta
más temprano el día.
Hoy mi puerta cruje de alegría
la penumbra del rancho es bella.
Hoy las velas se encienden solas,
y mi juventud sonriente me visita.
Hoy ha vuelto la carcajada de mis tardes,
el desvelo de mis noches,
el vapor del café en mis albas.
Hoy… ha vuelto

jueves, 3 de octubre de 2013

YO, EL PUEBLO

Llevo quinientos años en la espalda,
apretujados contra mi columna,
un amasijo de barro ensagrentado,
cuelga de mi cuello sucio,
llevo el despecho del Mapuche y del Apache,
ensartado en los poros de mi frente,
cargo con los vestigios de las colonias
desde Malvinas hasta el Caribe
y la injusta carga de un bloqueo de diez lustros.

Me palpita el pecho verde,
tengo las venas negras y cobrizas.
Me bañan los océanos y los huracanes me despeinan,
ya no me inmuto ante la muerte
me la dejaron de herencia
desde los rascacielos,
aplastan mis luchas,
desde la calle del muro,
quieren venderme y comprarme.

Llevo mis hombros marcados
por el látigo del mantuano,
y los pulmones llenos de agua salada,
para dar tesoros de nácar, de tierra y metal

Pero me levanto, resuelto cada día,
a acompañar al sol en su camino,
lanzo mis redes,
trillo mi tierra,
esgrimo mi martillo,
y pego otro ladrillo de la historia
cincelo la vida que sueño.
Es  la era del año cien

¡Estoy despierto!