miércoles, 20 de julio de 2016

SE FUE

Aquí estoy, rumiando tu partida silenciosa cabalgando la metáfora de tus pasos que se van alejando de mi sombra.
Ya me había acostumbrado a tus toallas mojadas y tus cabellos tapando el desagüe, ya era natural, mi brazo derecho acalambrado bajo el peso de tu cabeza esas noches de imitación de película lacrimógena, ya era normal besarnos en la mañana antes del café, esos besos ácidos, certeza de que había algo más allá de un aséptico gusto, hasta ya nos soportábamos tiernamente los gases
nos espiábamos a través de la cortina de la ducha
Pero no sé… Yo, me siento hasta feliz, en esta ahora extraña forma de serlo, no tengo ganas de llorar tu partida, aunque te extraño desde tu primera palabra.
Ve con ella, tranquila, con ella sonríes
bueno es para los tres,
desaprendiendote...
Aquí estoy.

DÍA DE FIESTA

Me picas la lengua,
jengibre y veneno de avispa
me despeinas las hebras escasas,
sempiterna ventolera levanta faldas
arrullas el insomnio del despecho
clavas tus cristos por toda la geografía de mis sesos
y te duermes, placida, como muerta,
en los jardines de mis ganas.

Que detestable, este recuerdo sin pasado
este recuerdo manoseado,
este huérfano dejavú de tu ausencia perenne.

Mortecino jolgorio de los desahuciados de tus caderas,
no estoy solo en esta fiesta sacra,

dedicada a tu beso  cincelado.